Mares vacíos, mercados llenos.

Con la llegada de la navidad, el consumismo descontrolado se apodera de la mayor parte de la población. En esta entrada no haré referencia a la compra masiva de regalos, sino de comida. Al aumento de producción de alimentos, y a la muerte de mas animales.
Los mas afectados en esta época son los peces.

Cientos de barcos pesqueros surcan hoy los mares introduciendo demasiados anzuelos en ellos, pescando cantidades exageradas de animales, los cuales mas de la mitad acabarán en la basura. Porque como ya sabemos, el pescado se suele querer fresco.

Hoy, los peces no tienen escapatoria.
Y digo yo, ¿de verdad es necesario que en estas fechas se aumente tantísimo la pesca?
¿No se deberían marcar ciertas pautas para que no se saquen del mar estas cantidades ingentes de pescado?

Cientos de miles de kilos de salmón pasan a diario por el mercado.. Aunque los países ricos observen buenas prácticas en sus aguas territoriales, a menudo confían en la escasa regulación de los países en desarrollo para cubrir parte de su demanda, causando el desabastecimiento de pescado en los países pobres.

Una vez mas, el capitalismo vuelve a llenarse la barriga y a tirar alimentos, dejando a otros morir de hambre.
Y como bien digo en el título, hoy los mares están vacíos. Los mercados, llenos. Demasiado llenos.